El Pleno del Ayuntamiento de Sagunto, celebrado este jueves 27 de diciembre, aprobó la moción presentada por el Partido Popular (PP) en defensa de la caza, en la que se urgía que “se tomen medidas inmediatas en defensa del sector cinegético y se aceleren los trabajos encaminados a disipar dudas y consolidar una actividad tan importante para la economía de nuestro país que implica a sectores muy diversos”, según el portavoz del partido, Sergio Muniesa. La moción salió adelante con el voto favorable de los partidos políticos, salvo Esquerra Unida y ADN Morvedre que votaron en contra, e Iniciativa Porteña y el edil del grupo mixto, José Vicente Muñoz, que se abstuvieron.
En el acuerdo plenario se refería a la caza como “una actividad económica legítima, necesaria para el interés general ya que, además de mantener un alto compromiso con la conservación de la biodiversidad, genera renta y empleo, representa una oferta turística singular para el mundo rural con demanda internacional y se desarrolla en zonas del interior de nuestro país, contribuyendo a disminuir el preocupante fenómeno de la despoblación”.
Además, la moción recogía que según la Fundación para el Estudio y la Defensa de la Naturaleza y la Caza, así como la Real Federación Española de Caza, en España existen aproximadamente unos 332.000 cazadores federados y se expiden unas 800.000 licencias anuales. Según la consultora Deloitte, la actividad cinegética representa el 0’3% del Producto Interior Bruto (PIB) español, un gasto de más de 6.475 millones de euros y genera 187.000 empleos. Pero, además del aspecto económico, a través de la contribución de la caza al Productor Interior Bruto (PIB) y generación de retornos fiscales y mantenimiento de empleo, la actividad cinegética contribuye a un desarrollo social asociado a la sensibilización, ya que sin caza no se entendería la protección y conservación de especies, tanto animales como vegetales, y la conservación del patrimonio natural, forestal e histórico.
Sergio Muniesa especificó que “es de especial interés, en este momento, la contribución que desde el sector cinegético se está ofreciendo a las medidas de control y prevención de episodios de riesgo sanitario como los derivados de enfermedades como la mixomatosis, la tuberculosis o la temida peste porcina africana, presente ya en varios países europeos y que podría causar daños con incalculables consecuencias sobre la cabaña porcina española”.
“En definitiva, la caza equilibra aspectos económicos, de desarrollo del medio rural y de conservación de la naturaleza. En el caso de especies de caza mayor, hoy la caza es, probablemente, el único instrumento real disponible para controlar poblaciones ante la ausencia de predadores naturales necesarios para mantener un equilibrio con la capacidad de los ecosistemas. Este hecho queda demostrado en diferentes especies como es en la gestión poblacional del jabalí en la región del Pirineo”, añadió Muniesa.