La Generalitat, conforme con la solicitud de Paraje Natural Municipal para la montaña de Romeu

Según la concejala de Medio Ambiente, Teresa García, asegura que “queda terminar la tramitación administrativa, pero esta conformidad lo que avala es la riqueza ambiental que queremos destacar de esta zona y, por lo tanto, la hace merecedora de la protección que le corresponde para salvaguardar sus valores naturales”.

El Ayuntamiento solicitó la protección del monte por varios motivos, entre los que se encuentra su alto valor ecológico, faunístico, así como paisajístico y por el alto interés del patrimonio cultural presente en él. La zona protegida corresponde a la delimitación reflejada en el proyecto datado de julio de 2006, es decir a las zonas municipales de Romeu y de Margas que se inscriben en su totalidad dentro del suelo no urbanizable protegido y afecta al área extractiva autorizada en el PGOU de 1992. Además, el Ayuntamiento se compromete a gestionar el futuro espacio natural protegido tal y como indica la ley que regula los parajes naturales municipales de la Comunitat Valenciana.

Según el proyecto de plan especial del paraje natural municipal “Romeu” de 2006, presentado por el Centre d’Estudis del Camp de Morvedre y aprobado por Conselleria, donde se describen los motivos por los que se debe proceder a una protección real, se enumeran los posibles impactos o factores de riesgo que pueden afectar sobre los valores ambientales o culturales, cinegéticos o agrícolas. Entre ellos se encuentran los derivados del uso público o recreativo, los riesgos por incendio forestal, las actividades extractivas colindantes al paraje, así como las derivadas de las infraestructuras y urbanizaciones cercanas.

En cuanto a la vegetación existente en la montaña de Romeu se pueden encontrar especies como la coscoja, el lentisco, el aladierno, el enebro, el palmito, el pino carrasco u otros matorrales como el romero, tomillo, aliaga, jara estepa y el brezo. También se encuentran algunas zonas de cultivos con ejemplares como el algarrobo y el olivo, o vegetación característica de los barrancos como es la adelfa, la zarzamora, el mirto, las cañas, el hinojo y las lianas.

Entre la fauna asociada a este paraje natural se puede encontrar fauna asociada a zonas forestales, como aves de bosque o matorrales; fauna asociada a zonas de roquedo, como las lagartijas o serpientes; fauna asociada a zonas de cultivo, como el búhos, ratones campestres o erizos entre otros; fauna asociada al hábitat urbano y fauna cavernícola, como el murciélago.