Teresa García se muestra a favor de la medida de gravar mediante tasa a las empresas por la incineración de residuos

La concejala ha aplaudido la medida propuesta por el secretario autonómico de Medio Ambiente, Julià Álvaro, al respecto de elevar el veto a la incineración de cualquier tipo de residuo para producir energía en sustitución de los tradicionales combustibles
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La concejala de Medio Ambiente, Teresa García, se ha mostrado a favor de la medida de gravar mediante tasa a las empresas por incinerar residuos tóxicos y contaminantes que ha propuesto el secretario autonómico de Medio Ambiente, Julià Álvaro.

Según García, la incineración y la valorización energética de residuos peligrosos “no tendría que llevarse a cabo en nuestro municipio, pero el Plan Integral de Residuos (PIR) que aprobó el anterior gobierno, en cuanto a los residuos industriales, deja abierta la veda a no realizar ningún tipo de tratamiento previo y no aplicar la jerarquía reducción, reutilización, reciclaje, valorización energética y eliminación, que indica y que obliga la Unión Europea”.

La concejala puntualiza que este PIR aprobado por el el anterior gobierno “deja todo desregularizado, con lo que cada cual pueda hacer lo que quiera” y, añade que esto ha provocado que las empresas cementeras se aprovechen para, sin realizar los pasos previos, se pase a la valorización energética, hecho que debería ser el último paso ha dar en la gestión de residuos industriales, por lo que, manifiesta ,“no podemos permitir que esos residuos pasen a ser los combustibles alternativos de las cementeras”.

García ha ratificado el interés del Ayuntamiento por cambiar el marco de regulación del PIR “para que esto no pueda pasar y es por ello que  apoyamos la medida que quiere poner en marcha la Consellería de disuadir económicamente la utilización de esos residuos como combustibles” y ha añadido que si necesitan de cualquier tramitación parlamentaria para acelerarla o para que la medida tenga una mayor efectividad “nos ofrecemos a colaborar con la Consejería para llevarla a cabo”.

Por otro lado, la edila pide a los ayuntamientos, como el de Sagunto, afectados por la incineración de residuos por parte de las empresas que aquello que se recaude se transfiera en las zonas afectadas en forma de inversiones de recuperación ambiental y para poder paliar los efectos de la contaminación que se produzca por la incineración de esos residuos. “Entendemos que si la actividad industrial está produciendo una merma en la salud de las zonas afectadas tiene que compensarse en la vía en la que se está proponiendo, pero tenemos que trabajar en dos vías, primero lograr que antes de que llegue la valorización energética, los residuos industriales peligrosos se recuperen o se reciclen, y no tener que llegar a esta vía; y por otra parte disuadir de aquello que ya esté autorizado en forma de tasa”. Y, por ello, García ha recalcado que Sagunto se ofrece a trabajar conjuntamente con la Consejería para desarrollar esta tasa.

Además, la concejala ha recordado que el Ayuntamiento de Sagunto está realizando un plan de calidad del aire en la ciudad. “Si en ese plan de calidad del aire detectamos que, independientemente de que los límites de emisión de nuestras empresas estén bajo la legalidad y cumplan con lo autorizado, los niveles de calidad del aire no son los correctos y son perjudiciales para la salud de la ciudadanía, pediremos y exigiremos la revisión de las autorizaciones ambientales integradas en cuanto a la incineración de residuos peligrosos a todas aquellas empresas que estén utilizando residuos peligrosos como combustible”, ha afirmado García refiriéndose concretamente a la cementera situada a 200 metros del núcleo de población de Sagunto, y que según ha manifestado “quema una cantidad indecente de residuos peligrosos como combustible alternativo de su proceso habitual”.

Ha argumentado también que el combustible habitual que utiliza esta empresa es coque de petróleo, con lo cual “tenemos que advertir a la población que, pese a ser autorizado y permitido por la legislación, esta empresa quema el contenido de un barco como el Prestige todos los años”, haciendo referencia al petrolero que naufragó en las costas gallegas en 2002 y que estaba lleno de este tipo de petróleo, y que acabamos respirándolos de forma legal”. Por eso, ha manifestado que hay que ver qué efectos sobre la salud tienen estas emisiones “porque si no son los adecuados exigiremos que se endurezcan las medidas en cuanto a la emisión y en cuanto a la utilización de los combustibles en este tipo de procesos”.​

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